Vivimos en un mundo en el que el desarrollo digital es una constante. Cada día, un avance tecnológico es noticia y requiere de nuevos profesionales con los conocimientos necesarios para saber utilizarla y sacarle partido.
Prácticamente todos los sectores de nuestro mercado desarrollan su actividad apoyándose en herramientas tecnológicas, por lo tanto, tener unos conocimientos y competencias tecnológicas básicas es esencial en la época en la que nos encontramos.
Uno de los requisitos más exigidos en todos los procesos de selección de personal es poseer habilidades en programas muy asentados en los entramados empresariales, como el Paquete Office.
Programas como Excel, uno de los más comunes, sirven de mesa de trabajo para departamentos financieros, analistas de datos, gestión y organización de clientes, comercial, compras, logística…
Excel te permite el análisis y gestión de datos externos, todos vinculados a una hoja de cálculo donde puedes aplicar todo tipo de filtros en función de tus necesidades: filtros avanzados, funciones de búsqueda y referencia, conexiones a datos externos, creación de subtotales, tablas dinámicas, etc.
Otra de las tareas más comunes y necesarias a nivel corporativo, ya que permite plasmar todo de manera escrita y desgranada, es la creación de documentos internos o externos. En estos documentos se suele plasmar información relevante a la empresa, para construir un archivo y que sea consultable por cualquier departamento o directivo en caso de necesidad. Para la creación de estos documentos, la herramienta más utilizada es Word.
Word permite la aplicación ofimática de procesador de textos, gestionar tablas, gráficos, organigramas y diagramas. Además de crear referencias en los documentos, permite trabajar simultáneamente con otras aplicaciones y distribuir documentos desde HTML.
El manejo de herramientas como estas, supone aumentar las posibilidades de éxito en un proceso de selección. Al final, son herramientas tan asentadas que siempre requerirán de un profesional cualificado.
Los avances tecnológicos seguirán siendo una dinámica a la que el mercado laboral tendrá que adaptarse, como lleva haciendo desde la aparición de internet. Por tanto, ir a corriente de esta revolución, marcará la diferencia.
Patricia Casas, Communication department y tutora E-learning.
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