Hace unos años apareció el código Bidi, el cual prometía ser una revolución en el mundo de la interactividad y acceso al contenido multimedia. Se trataba de un código de pago que con la aparición del código QR, gratuito, desapareció. El QR no es otra cosa que un código de respuesta rápida (Quick Response) que une el entorno físico con el digital mediante un código de barras que permite el acceso a páginas web, contenidos descargables, vídeos… Se presenta de forma cuadrada, un gráfico en el que dirigiendo la cámara del teléfono móvil puedes acceder a la información que el negocio desea comunicar. A pesar de su utilidad, en el momento de su aparición el auge por dichos códigos no duró demasiado. Con la aparición de la pandemia ha vuelto a ponerse de moda. El hecho de evitar la transmisión mediante objetos ha hecho que celulares y este código se hayan convertido en herramientas indispensables para muchos sectores. Un buen ejemplo es la digitalización de las cartas de los bares y restaurantes.
Por eso, una buena gestión del negocio implica utilizar recursos como este para poder salvar la atención al cliente en tiempos de crisis. Los códigos QR pueden tener diversos tamaños, colores e incluso dibujos insertados. Es indudable que el código QR ha vuelto para quedarse en esta nueva normalidad en los escaparates, en paradas de autobuses, mesas de restaurantes y sin fin de locales…
El código QR puede generarse de forma online o con programas como InDesign de forma 100% gratuita. Este tipo de soluciones digitales para negocios de restauración y hostelería ha visto crecer sus servicios en los últimos meses. En la transformación digital de cualquier local, podemos exprimir sus ventajas haciendo de éste un espacio interactivo y que no solo se limite a la digitalización de una carta en un pdf estático. Algunos locales ofrecen, además, la posibilidad de pedir y acceder al pago. Cuando éste se efectúa, se prepara el pedido y una vez listo da aviso al usuario para que éste pueda acercarse a retirarlo. Una vez que el cliente realiza el pedido, reciben una notificación en su sistema web, imprimir la comanda y preparar la orden.
No obstante, ha presentado en su inicio algunas barreras fruto del desconocimiento por parte de los consumidores, mientras que ya se plantea más que superado puesto que la mayor parte de los dispositivos móviles integran la detección de este código en la cámara fotográfica. Una propuesta ecológica y económica que elimina recibos y tickets innecesarios.
Paco Rosco, profesor de Ilustración y Dirección Creativa de Grupo Colón-IECM

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